En la actualidad, el Juzgado Único de lo Social de Eivissa está en el edificio Cetis. | Marco Torres

La Sala de lo Social del TSJ ha condenado al colegio británico Morna Valley Schooll a readmitir o indemnizar con 14.857 euros a un profesor de arte al que despidió de forma improcedente bajo la acusación de haber agredido a un alumno de trece años de edad. No obstante, esta sentencia podría ser recurrida en la Sala IV de lo Social del Tribunal Supremo.

En la carta de despido que la empresa entregó al profesor, en septiembre de 2009, se argumentaba que «el día 15 de octubre empujó violentamente fuera del aula a un niño de la clase Year 8 de una manera totalmente injustificada y desproporcionada, utilizando la violencia física con uno de los alumnos, conducta que es totalmente inapropiada, de acuerdo al convenio colectivo de aplicación en su artículo 82, que califica los malos tratos como falta muy grave, y al artículo 54.2.c del Estatuto de los Trabajadores».

En la carta que se envió al profesor despedido, que es de nacionalidad estadounidense, también se le acusa de que «en el último mes también se le ha amonestado por no ajustarse a las programaciones anuales acordadas, por demostrar reiteradamente pasividad y por abandonar injustificadamente y sin aviso su labor docente».

Por su parte, el profesor explicó que el 15 de octubre de 2009, durante una clase del curso de 8 años, recriminó varias veces su actitud a uno de los alumnos, indicándole a continuación que abandonara el aula. En la sentencia se dice que el profesor acompañó al menor hasta la puerta sujetándole del brazo. «En aquel momento el menor cayó al suelo», se apunta en el escrito judicial, «sin que haya quedado acreditado si lo fue por un empujón del profesor o porque perdió el equilibrio», tras lo que rompió a llorar.

De 6.824 euros en el juzgado de Eivissa a 14.857 en el TSJ

El Juzgado Único de lo Social de Eivissa ya calificó en primera instancia el despido de improcedente y obligó a Morna a la readmisión o a indemnizar al profesor con 6.824. Tras los recursos de ambas partes, el TSJ ha confirmado la improcedencia del despido y ha elevado la indemnización al profesor hasta los 14.857 euros.