Conchi Piernas es una lorquina instalada hace siete años en Eivissa que regenta un centro de estética en el número 22 de la calle Carlos V de Vila. A pesar de que en Lorca están acostumbrados a los pequeños temblores de tierra, lo que ocurrió anteayer la dejó muy preocupada. En cuanto pudo se puso en contacto con sus familiares, alguno de los cuales viven en la zona de la ciudad más afectada por el seísmo. Por suerte todos resultaron ilesos. Pero vivió tensión hasta que logró localizarlos.

«A ninguno le ha pasado nada, he hablado con ellos y todos están bien», explicó ayer. «En las casas hay muchos desperfectos y han tenido que desalojar las viviendas», señaló. «Esta noche no van a regresar a sus viviendas por precaución y van a ir a dormir a casas de campo de familiares», añadió.

Gloria Saura Ortiz es la presidenta de la Casa de Murcia, una asociación que cuenta con cien familias de la región, ninguna de ellas de Lorca, a pesar de que esta es la tercera ciudad de esta comunidad autónoma. Su familia reside lejos de las zonas donde se ha sentido el terremoto.

Dos seísmos

«Esta mañana [por ayer] he hablado con Presidencia de Murcia y me han dicho que ahora los ingenieros están valorando los daños; hay mucha ayuda de Protección Civil de otras comunidades», señaló Saura. «Nosotros les hemos ofrecido ayuda y estamos a la espera de ver qué nos dicen», añadió.

Enrique Garcerán, presidente del PP de Sant Josep, fue el antecesor de Gloria Saura al frente de la Casa de Murcia. «Anoche [en referencia al miércoles] hablé con 50 personas; en unas zonas se ha notado y en otras no, pero en Lorca ha sido una barbaridad», recordó.

«Tras el primer movimiento la gente se tiró a la calle y, con el segundo, que fue más fuerte, fue cuando se produjeron casi todas las víctimas mortales, ya que comenzaron a caer objetos sobre ellos», señaló. Garcerán es de San Pedro de Pinatar, en el Mar Menor. «También tengo familia en Murcia y en la Huerta y por suerte nadie ha resultado herido», celebró.

Sánchez-Jáuregui: «Mi hermana ya no pudo entrar en Lorca»

La candidata del PP a la alcaldía de Vila, Marienna Sánchez-Jáuregui, es de Àguilas y pasó su infancia en Lorca, donde reside su hermana. Mostró su solidaridad para con las víctimas y sus familias y explicó que su hermana le dijo que la ciudad está desolada, que parecía un pueblo evacuado, sin agua ni gas, y que ella, que estaba en Murcia cuando se produjo el temblor, ya no pudo entrar en Lorca.

Según el relato de la hermana, hay casas derrumbadas, aunque la mayoría ha aguantado y lo que ha caído son cornisas. Por dentro, las casas están destrozadas. «Se han caído los televisores, los estantes... La gente que tiene casas de campo o familiares en el campo se han marchado allí», dijo la candidata.