La Policía Local de Sant Antoni organizó anoche un dispositivo de control de alcoholemia a conductores en el cual se realizaron un total de 17 pruebas, entre las cuales se tramitaron dos denuncias administrativas por tasa superior a 0,25 mg/l, arrojando los conductores unos niveles de 0,43 y 0,47 mg/l respectivamente.
Otros dos conductores fueron detenidos al alcanzar niveles con consideración penal, tales como 0,65 mg/l y 0,80 mg/l respectivamente.