Los hechos ocurrieron a la una y diez d la madrugfada en este punto de Caló des Moro. g Foto: NATALIA NAVARRO

La Guardia Civil está buscando al conductor de un taxi que ayer de madrugada, presuntamente, acuchilló en Sant Antoni a un cliente y lo dejó herido de gravedad. Hay un testigo que señaló a la Guardia Civil que el agresor fue el conductor de un taxi de Vila, en concreto un monovolumen de color blanco, si bien los investigadores barajan también la hipótesis de que se trate de un taxista pirata. Por el momento no se ha anununciado ninguna detención. De la investigación se ha hecho cargo la Policía Judicial de la Guardia Civil.

Los hechos ocurrieron a la una y diez de la mañana en la calle Velázquez de Sant Antoni, justo frente al hotel Poniente. Tres jóvenes turistas del Reino Unido tomaron el taxi, el monovulumen de color blanco - legal o pirata- en el hotel Ushuaïa de Platja d’en Bossa y pidieron al conductor que les llevara a Sant Antoni. Cuando estaban en la zona de es Caló des Moro se produjo una discusión que acabó con una única cuchillada y el conductor del monovolumen fugado.

Discusión

Al parecer, la discusión se produjo porque el taxista temía que los clientes no le fueran a pagar el servicio realizado desde Platja d’en Bossa, según explicó el testigo a la Guardia Civil. El caso es que, según este testimonio, el taxista apuñaló al joven.

Fue una única puñalada bajo la axila izquierda. Fue atendido ‘in situ’ por el personal de una UVI móvil del servicio del 061 y después trasladado al hospital de Can Misses.

Desde el Ib-Salut explicaron ayer que el herido, Grant S., un joven de nacionalidad británica de 22 años de edad, se encuentra en estado grave pero estable y está consciente. La puñalada, bastante profunda, llegó a tocarle el bazo. Quedó ingresado en la Unidad de Cirugía de este hospital.

Drogas

El testigo también explicó que los tres británicos estaban muy alterados durante la discusión con el conductor y que todo apuntaba a que se encontraban bajo los efectos de drogas y alcohol.

Los investigadores también valoran la hipótesis de que el conductor se viera increpado e incluso agredido por los jóvenes británicos, que actuara en defensa propia y, una vez que vio la herida que, presuntamente, ocasionó al joven, optó por escapar del lugar.