Karina Rosales fue hallada asesinada en una casa de Cala Salada. | Redacción Sucesos

El caso de la muerte de María Karina Rosales Rivera, un crimen por el que está acusado el agente de la Policía Local de Sant Josep Francisco R.R., se dirimirá mediante la ley del jurado. Es decir, será un grupo de ciudadanos de las Islas elegidos al azar quienes se encarguen de dictaminar la culpabilidad o inocencia del acusado. No obstante, aún no está culminada la instrucción del caso, que recayó en el Juzgado de Instrucción número 2 de Eivissa, ni existe calificación del delito por parte del ministerio público, que podría acusar por homicidio o por asesinato al hasta ahora único acusado. Francisco R.R. se encuentra preso con carácter provisional en una cárcel de Madrid.

En julio pasado, el juez José Espinosa, titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Eivissa, abrió la puerta a la libertad provisional con una fianza de 10.000 euros de Francisco R.R. por falta de pruebas. Sin embargo, unas semanas después, y en respuesta al recurso que la Fiscalía interpuso contra al decisión del titular de Instrucción 2, la Audiencia Provincial consideró que existen indicios suficientes como para que el acusado permanezca en prisión y revocó el auto del juez.