Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia fue la ofrenda floral a los compañeros caídos. | Toni Escobar

La Guardia Civil celebró ayer a mediodía su día grande, una jornada en la que subrayaron su compromiso con la ciudadanía y la justicia los 365 días del año. Una jornada de celebración y también de sentido recuerdo para los compañeros que se dejaron la vida en cumplimiento del servicio, como el subteniente Andrés Ruiz Perona o el agente José María del Olmo.

Un recuerdo que estuvo presente durante la misa con la que se abrió el acto conmemorativo de la festividad de la Virgen del Pilar, la patrona de la Guardia Civil.

Además de la plana mayor de la Guardia Civil, al acto asistieron, entre otros, el Director Insular, Roger Sales, el comisario jefe de la Policía Nacional, José Luiz Santafé y autoridades políticas encabezadas por la vicepresidenta del Consell, Marta Díaz, el alcalde de Eivissa, Rafael Ruiz, y el senador Pepe Sala.

A ellos se sumaron más de 200 personas ,entre agentes, familiares, y representantes del mundo empresarial de la isla.
Los momentos más emotivos llegaron con el homenaje floral a los compañeros caídos, un reconocimienro que se cerró con una salva.

Durante el acto se reconoció la labor o trayectoria de seis agentes. Así, Ignacio Piris, cabo del Área de Investigación de Sant Antoni, fue reconocido con la Cruz Orden Mérito del Cuerpo de la Guardia Civil con distintivo blanco en reconocimiento a su trabajo en la operación Arubi de la ECO contra el narcotráfico, en la que hace dos años se intervino a una banda de marroquíes varios miles de euros en cocaína en Cala de Bou. Un distintivo con el que también fueron reconocidos Bruno Ramos y Marcel Luis Polo. El GEAS Daniel González y José Carlos Domínguez fueron distinguidos con la Cruz de plata al Mérito de la Guardia Civil. Por su parte, José Antonio Rojano, 29 años en la Guardia Civil, los últimos 21 en el destacamento de Tráfico de Eivissa, fue distinguido con la Medalla al Mérito de la Seguridad Vial, clase bronce, distintivo azul, un reconocimiento que solo se concede a cuatro agentes en toda España.

También fue distinguido el alférez Pablo Gárriz y el agente retirado José Mora.

En su discurso , el comandante jefe de la la Guardia Civil de Eivissa y Formentera, Antonio del Fresno, recordó la fundación de la institución en 1884, fruto «de un amplio consenso político para hacer frente a la situación de inseguridad existente en todo el territorio nacional», un mensaje que más de uno circunscribió a los momentos actuales que vive España y su clase política.

La vicepresidenta del Consell, Marta Díaz, destacó el trabajo que realiza la Guardia Civil en las islas y expresó su «muy sincero agradecimiento al trabajo en favor de la convivencia pacífica de todos los ciudadanos». Díaz, quien disculpó la ausencia del presidente Vicent Torres por encontrarse en los actos celebrados en Madrid, destacó que el «sello de identidad es ir más allá en colaboración ciudadana, rescate de personas con cuerpos como el GEAS o la protección de la naturaleza con el trabajo del SEPRONA o el gran trabajo que realiza la Guardia Civil en materia de seguridad vial».

Por su parte, el Director Insular, Roger Sales, destacó la capacidad de adaptación de la Guardia Civil. «Sabéis adaptaros a los tiempos, asumir los cambios históricos», señaló Sales, quien añadió «debéis estar preparados para luchar contra una delincuencia cada vez más especializada. Ser guardia civil es algo más que un trabajo, es una forma de vivir».