Durante más de dos horas los alumnos de Morna International College disfrutaron como los niños que son. Foto: TONI ESCOBAR

Morna International College, la escuela privada situada muy cerca de Santa Gertrudis, vivió ayer unas horas muy especiales donde se juntaron una inauguración junto a solidaridad y diversión.

Inauguración porque el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, cortó la cinta del nuevo edificio del centro educativo. Unas instalaciones que incluyen 14 nuevas aulas distribuidas en dos plantas y que, según Julie Harwood, encargada de las finanzas de Morna International College, “marcará un antes y un después en el colegio porque permitirá que los alumnos puedan estudiar asignaturas como Ciencias, Matemáticas, Música, Arte o Diseño, esta última con máquinas de última generación”.

Solidaridad porque la apertura de las nuevas clases coincidió con la celebración de la tradicional feria de otoño que organiza todos los años el centrol. Tal y como explicó la propia Julie Harwood, se trata de una iniciativa que ponen en marcha todos los alumnos del colegio, desde los 5 a los 18 años, junto a sus padres con el fin de vender productos, desde galletas, pasteles o bollos hasta juguetes o algo de artesanía, que sirvan para recaudar fondos que luego se destinarán directamente y sin intermediarios para una causa solidaria. En esta ocasión, la organización escogida por los propios alumnos ha sido Amnistía Internacional.

Jornada de diversión

Y finalmente diversión, porque la jornada, que se prolongó desde las 14.30 a las 16.30 horas, justo después de las clases, también incluyó distintos juegos infantiles. Entre todas ellas, además de un gran castillo hinchable llamó la atención una ‘atracción’ consistente en, previo pago de dos euros, poder lanzar tres esponjas mojadas sobre un profesor que, paciente y estoico, aguantaba con la cabeza dentro de un enorme agujero.

Incluso, también hubo tiempo para que los alumnos desarrollaran y sacaran todo el talento que tienen dentro. Y es que los más atrevidos pudieron subirse al escenario y demostrar sus habilidades en el mundo de la música y la canción mientras sus compañeros evaluaban y votaban sus actuaciones.