Camilo Blanes ha tenido un intento fallido de entrar en una clínica de desintoxicación. Según contaba hace unos meses la que dice ser su amiga, Christina Rapado, el hijo de Camilo Sesto «había tomado la decisión de entrar al resort que él dice, a finales de noviembre'' para ''disfrutar la vida y cuidarse».

Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Según contó Sergio Pérez en Fiesta, «el 16 del mes pasado iba a ingresar en una clínica de la sierra de Madrid, pero él se niega por completo, aunque en un primer momento estaba decidido». «Sigue estando en las mismas condiciones, y él se niega a entrar. Continúa todo igual».

«Nunca ha tenido ni la más mínima intención de ingresarse», indicó, por su parte Aurelio Manzano. «Es verdad que se lo propuso su madre, pero él nunca ha querido ingresarse, y ese es el gran problema, porque él no está bien, y sus amistades no le sirven de ayuda».

Ahora, una nueva información sobre el hijo de Camilo Sesto vuelve a encender las alarmas sobre su presente. Según cuenta Pronto, Blanes, que no ha hecho ninguna mención especial a los días festivos ni a fin de año, ha compartido una imagen posando con un arma de fuego, un fusil, junto a un corazón de color negro, sin aclarar si este arma también es un juguete.

Noticias relacionadas

Se trata de una de las imágenes más preocupantes de los últimos tiempos, y eso que Camilín, como le llaman en su círculo íntimo, ha ido publicando momentos en los últimos meses que han alarmado a todos sus allegados. Entre ellos una foto con una pistola y un hacha que colgaba de una pared.

Sin embargo, el joven aclaró después que era falsa. «Sí, hay una pistola de juguete 💋», escribió en su perfil de Instagram, dejando claro que el objeto, que aparece de nuevo en un selfie con amigos, no era de verdad.

Sorprendente negocio

Fiesta reveló hace unos días un nuevo proyecto en el que estaría implicado Camilo Blanes. Según contó Serio Pérez, que se reunió con dos personas cercanas a Blanes, una de ellas Christina Rapado, el nuevo negocio del hijo de Camilo Sesto es comercializar unas camisetas con un dibujo de su cara actual sobre el nombre Devil (demonio en inglés).

El propio periodista mostró la camiseta de la que hablaba para desconcierto de Emma García y el resto de colaboradores. «No es la palabra, es la cara», señalaba, sin creérselo, la presentadora. «Estamos impactados», trataba de decir ante la imagen que estaban viendo. «Me traslada a esos momentos del verano donde nos sorprendió». «En esa imagen se nota que no está bien», aseguraban desde el plató.

Aurelio Manzano, incluso, puso en duda que el hijo del fallecido artista haya dado el visto bueno a que se comercialicen camisetas con esa imagen: «En la reunión llamaron a Camilín con manos libres y él está de acuerdo», aseguraba, por su parte, Sergio Pérez, en respuesta a Aurelio.