Cuando en Ibiza uno habla de solidaridad, de entrega, de cariño y de compromiso es imposible no pensar en Alba Pau. Ella tiene el curioso don de hacernos sentir tan afortunados como imbéciles con el mismo argumento. Mientras a unos nos preocupan las banalidades insulsas y pasajeras de la rutina diaria, hay familias con un hijo con cáncer, hay un autista sin terapeuta o hay un niño que sufre abusos sexuales. Vivimos en una burbuja de superficialidad que nos aleja de una realidad sangrante que nos puede tocar vivir en cualquier momento.
Opinión
Los niños de Alba
También en Opinión
- «Soy de Ibiza, tengo trabajo y duermo en el coche por el precio de los alquileres»
- La ruina de la vivienda en Ibiza: venden una casa «a reformar» por más de dos millones de euros
- Un joven de 28 años permanece en la UCI en Ibiza tras ser atropellado por un camión
- Un vecino de Ibiza, entre los diez mejores sumilleres de España
- El CD Ibiza se carga al Mallorca B y asciende a Segunda RFEF
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Articulazo para remover alguna conciencia de algún funcionario de la "casa"...