Tras dos años de pandemia, en las clases ya se puede estar sin mascarilla. | Daniel Espinosa

Con máximas de 31 grados y una sensación térmica que rozó los 34 grados en Ibiza empezó ayer el curso 2022/2023. La delegada de Educación en las Pitiusas, Marga Ferrer, ha resaltado este lunes la «normalidad» con la que arrancó en las Pitiusas el nuevo curso. Dificultades para cubrir plazas de docentes de catalán en algunos institutos, así como de Matemáticas, Tecnología y «alguna plaza de FP, que son más específicas», han marcado este lunes el inicio del año lectivo. «Se está trabajando para cubrirlas todas. En Primaria e Infantil, lo que faltan ahora son sustituciones que han salido en septiembre», insistió. Ferrer manifestó que el nuevo año lectivo arranca con «nuevos retos e ilusiones» después de dos años de pandemia «tan complejos».

Según recordó, este año el uso de la mascarilla queda limitado al interior del transporte escolar y las aulas deberán seguir ventilándose de manera periódica, mientras que hay «algunas cosas que se quedan» por cuestiones organizativas, como la entrada de los alumnos por diferentes puertas, si bien no todos los centros lo continúan aplicando.

Calor

La delegada se refirió además a las altas temperaturas que se registran estos días en las Pitiusas y que pueden afectar al desarrollo de las clases. Por ello, se ha elaborado un protocolo específico para esta situación, con recomendaciones lanzadas desde Conselleria y desde el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, revisándose las aulas más calurosas en las islas por si deben instalarse ventiladores hasta que bajen las termómetros. «Los ayuntamientos, aquí en Sant Josep, han dejado ventiladores en las aulas más calurosas que también fueron utilizados durante las escuelas de verano», señaló.

Sobre esta cuestión, el conseller balear de Educación, Martí March, afirmó en Palma que los nuevos centros educativos que se construirán o ampliarán se hace bajo criterios arquitectónicos de eficiencia para reducir el calor en las aulas. En este sentido, recordó que el Ministerio de Educación tiene intención de poner en marcha un plan de climatización de 200 millones, de los que a Baleares podrían llegar hasta cuatro. En cualquier caso, admitió que no es viable poner aires acondicionados o ventiladores en los más de 300 centros que hay en las Islas. Precisamente, la pasada semana desde el sindicato STEi en las Pitiusas advirtieron sobre los problemas que las altas temperaturas podían provocar en este arranque de curso, con máximas que seguían superando ayer los 30 grados. Por ello, instaron a buscar soluciones urgentes, pensando también en el final de curso y en las carencias en climatización que sufren muchos colegios pitiusos.

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Obras

En relación a recientes obras ejecutadas, la delegada reconoció que en algunas escuelas se siguen llevando a cabo determinados trabajos, «aunque no interrumpen el funcionamiento de las clases». En este sentido, Ferrer recordó que en el CEIP Sant Ciriac de Santa Eulària continúan reformándose unos baños, una situación que también se registra en el IES Sa Blanca Dona de Ibiza. Sobre las obras de ampliación del IES Isidor Macabich, Ferrer reconoció que van a recepcionarse la próxima semana, por lo que algunas clases se seguirán impartiendo en otros espacios durante unos días más.

Ratios

En relación a las ratios, la delegada reconoció que, en infantil, los números «están muy bien en todos los municipios», mientras que en primaria, algunos grupos donde se superan los 25 alumnos han sido reforzados con un apoyo. «En principio, estamos cumpliendo las ratios que tocan. Nos gustaría que fueran más bajas, pero estamos cumpliendo toda la normativa y he de decir que son más bajas que hace seis años. Tenemos en las Pitiusas más de 200 docentes más que hace seis años», aseguró también.

Novedades

La delegada se refirió a la incorporación este curso de cuatro intérpretes de lengua de signos, recordando que hasta ahora eran pedagogos terapeutas con esta habilitación específica quienes ofrecían el servicio. «Hace unos años detectamos que existía una problemática, con auxiliares técnicos educativos que llevaban a cabo esta función pero que, si estaban de baja, no podíamos sustituir», explicó Ferrer.

Por ello, profesionales en pedagogía terapéutica y en audición y lenguaje llevaron a cabo una habilitación. Desde la Federación de Sordos en Baleares consideraron que técnicos superiores podían desempeñar esta labor, por lo que Conselleria abonará media jornada a estos profesionales que, por el momento, desempeñan su labor en cuatro centros de Ibiza: Poeta Villangómez, IES Santa María, CEIP Sant Ciriac y Escola d´Arts. La delegada explicó que en otros colegios donde hay alumnos con estas necesidades se contará también con profesionales que puedan asistirles.