Imagen de archivo del Parador de Ibiza.

El Parador de Ibiza es una de las obras interminables de la isla que ha sufrido varios retrasos en el tiempo y que han generado unas enormes expectativas en torno a su inauguración. Un estreno que, según el alcalde de Ibiza, Rafa Triguero, espera que no sea en plena temporada turística. «El Parador se tiene que abrir este año, pero no nos gustaría que se inaugurara en verano porque el año de apertura es para los ibicencos», señaló con rotundidad minutos antes de iniciarse la asamblea del Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad en la Feria Internacional de Turismo (Fitur). En esta misma línea, agregó que primero tienen que disfrutar de este espacio los residentes y convertirlo en uno de los puntos de referencia de la isla y, para ello, quieren establecer una línea de trabajo con el Instituto de Turismo de España (Turespaña) para dotar al Parador de Ibiza de herramientas atractivas para los ibicencos. En cualquier caso, el alcalde Triguero expresó que es «vital» que esté abierto este año.

Precisamente, este jueves en Fitur los técnicos del Ayuntamiento de Eivissa y el alcalde de Vila tuvieron un encuentro con la Secretaría de Estado de Turismo y la presidenta de Paradores para abordar la programación de finalización de los trabajos tras no poder retirar este mes la grúa, que lleva emplazada 12 años, de la obra del Parador en el Castillo. Retirada que adelantó el primer edil a finales de 2023 después de mantener una reunión con el presidente de Turespaña, Miguel Sanz, quien trasladó a Triguero que para el Día de Reyes ya se habría retirado esta elevadora. Además, en esta misma reunión también adelantaron desde la entidad que las obras estarían finalizadas para la temporada turística de 2024.

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Asimismo, Rafa Triguero, después de tantos retrasos, se mostró cauteloso sobre los plazos de ejecución «por si no se cumplen» y, únicamente, adelantó que el Parador será una realidad antes de que finalice 2024. Sí que adelantó la evolución de otros proyectos en desarrollo muy importantes para finalizar los trabajos. Entre ellos, el suministro e instalación de la decoración de zonas comunes y habitaciones del Parador. «Turespaña está licitando la instalación de mobiliario de interior», informó a Periódico de Ibiza y Formentera el primer edil mientras explicaba las fases actuales del procedimiento: «Lo primero es retirar la grúa, finalizar el resto de obras, conectar el agua y la luz -que esto depende de las compañías- y, una vez estén conectados estos suministros, se realiza la cesión total a Paradores de Turismo de España». En este sentido, destacó que hay máxima colaboración entre el Consistorio y Turespaña con la intención de agilizar por parte de Vila todo lo que sea necesario en cuanto al trabajo técnico. En este sentido, hay «línea directa» con Turespaña.
Es por eso que al Ayuntamiento de Eivissa le urge solucionar los problemas actuales que plantea la red de la canalización. «Estamos resolviendo una cuestión técnica relacionada con la distribución de agua potable para que llegue al Parador. Cuando acabemos esta obra, que la tenemos que desarrollar nosotros en una franja de 10 metros, ya pasará todo a Paradores», manifestó Rafa Triguero, resaltando que es un trabajo de cooperación secuencial: «Nosotros arreglamos esta cuestión y esto le permite al organismo ejecutar otras necesidades, aunque a veces intervenimos de forma simultánea». Indicó que la comunicación entre ambas instituciones es muy «fluida» y, además, se ha creado una buena «sintonía» con el objetivo de agilizar la finalización de un proyecto «muy importante para la isla».

«Estamos encima para que se agilice todo. Nuestros técnicos están en contacto con los suyos por teléfono cuando es necesario abordar este tema» añadieron fuentes municipales.

Asimismo, Rafa Triguero insistió en que cuando la entidad recepcione la obra es cuando podrá empezar a amueblar y decorar el interior de este espacio con la instalación de camas, colchones y cortinas, e iniciar su funcionamiento. En este sentido, fuentes municipales explicaron que esta licitación pública es un proceso administrativo que puede llevar tres meses como mínimo. Una espera que no modificará las previsiones del Ayuntamiento de Vila: «Sí o sí, este año se inaugurará el Parador de Ibiza».