Imagen de la carretera de Sa Canal, en el Parque Natural de ses Salines. | UH

Las excusas que el acusado puso delante de la policía y delante de la juez finalmente no han servido para nada, ya que la magistrada Martina Rodríguez, titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, lo ha condenado por conducir un quad con el carné retirado a una multa de 2.880 euros.

El ibicenco J.E.C. fue sorprendido el 19 de junio del año pasado por una patrulla de agentes de la Policía Local de Sant Josep cuando conducía un quad por la carretera de Sa Canal, en el parque natural de Ses Salines. Según explicaron los agentes en el juicio, decidieron darle el alto porque conducía sin casco, pero el hombre, al verles, emprendió la huida. Los agentes le siguieron y vieron cómo el hombre se metía rápidamente en una vivienda.

Los agentes locales llamaron a la casa y les recibió una mujer. Preguntaron por el conductor del quad que estaba aparcado en la puerta y la mujer les dijo que nadie había conducido ese vehículo Finalmente, el hombre salió a recibir a los agentes, a los que recibió en pareo y les dijo que se estaba duchando.

Uno meses antes

Los agentes no le creyeron, ya que, tal y como se explica en el capítulo de hechos probados, «no le perdieron de vista en ningún momento de la persecución».

Los agentes le solicitaron la documentación y comprobaron que J.E.C. había sido condenado por sentencia firme por conducir bajo los efectos del alcohol el 4 de febrero de 2013 a la pena de ocho meses de privación del derecho a conducir vehículos a motor.

Además de la multa, también ha sido condenado a sufragar las costas del juicio.